
Para colmo de esto, me desperté confundido, malhumorado... y me enrosque con mi pobre Chofita que no tenia nada que ver.
Luego de que se me bajaran los humos buscando por internet encontré una explicación lógica a todo:
Cuando comemos mucho y nos vamos a dormir, al no haber gasto de energía (azúcares) a uno le sube la insulina. Si además se trata de una comida salada la presión puede subir también. Es por eso que cuando se come y se va a dormir uno se despierta con pesadillas o duerme mal. Claro, porque el cuerpo tiene exceso de energía. El único remedio es levantarse y esperar a que baje la insulina y se normalice todo (aproximadamente son 2 horas de digestión). Pero bué... será la próxima.
No vuelvo a comer tanto antes de irme a dormir!
1 comentario:
HOLA EDU:
MUCHÍSISISISSÍSIMAS FELICIDADES!!!!!
Que la pases increíble, hoy si puedes comer mucho xq es tu cumple, q disfrutes tu torta!!
SALUDOS DE TU AMIGA MARIANA LA MEXICANA
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